CARPE DIEM

CARPE DIEM

Se feliz ahora

     

   

72 cumpleaños

 Aprovecha el momento presente para ser feliz. Este momento es irre-petible. El ayer pasó y el futuro no ha llegado. Lo único real que puedes vivir es el presente. Si te refugias en el pasado añorando tiempos que te parecen mejores o lamentándote de los errores come-tidos o de las desdichas sufridas, se te pasará el presente sin vivirlo. Si aplazas tu felicidad  a sucesos futuros, “Seré feliz cuando alcance estas metas, o cuando me case o etc”  habrás perdido tu oportunidad de ser feliz ahora, lo mismo que si vives angustiado por posibles desdichas del futuro.

      Del pasado lo único que nos puede ser útil son las enseñanzas de los errores cometidos, pero no para lamentarse por ellos sino para no volver a caer en la misma piedra. De la misma forma, las previsiones del futuro nos pueden servir solo para que tus decisiones y actos de hoy te ayuden a alcanzar los objetivos propuestos.

       

    

Carmen y Rita, mis amigas

Aprecia y valora lo que tienes, empe-zando por ti mismo. Claro que no eres perfecto y eso es algo que no debería preocu-parte, pero tienes tus cualidades que puedes cultivar y mejorar con el tiempo si te lo propones sin ex-igirte demasiado. Una de las bases de la felicidad es estar satisfecho contigo mismo y con tu entorno. No seas demasiado severo contigo, no lo serás con los demás y vivirás más feliz. Preocúpate por tu familia y amigos y por su felicidad. Entre otras cosas esto hará que te quede menos tiempo para preocuparte por ti mismo. Mejorareis todos, tu familia, tus amigos y tú mismo y seréis más felices.

    

        Cuando tengas algún problema real, de salud, tuya o de alguien querido, no te desanimes ni pierdas la confianza en superarlo. Busca los medios

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para ello. En primer lugar, si lo que te preocupa afecta a tu familia, comparte con ellos el problema y las posibles solucio-nes. Con ello no solo encontrarás la mejor solución, sino que aceptareis mejor las posibles consecuencias de la misma y dejará de ser una preocu-pación angustiosa para ser una labor compartida. Os sentiréis más unidos y con mejor ánimo.

       Si se trata de un problema de salud, buscad un buen asesoramiento, un médico en el que podáis confiar. Si tenéis claro el diagnóstico y tratamiento, podéis estar preocupados pero no angustiados, sabiendo a que os enfrentáis y como vencerlo. El problema compartido será más llevadero y no os privará de ser felices. 
        
   Contaba Riky Diaz en una charla titulada, "Las tres cosas que aprendí mientras se estrellaba mi avión", que volando hacia Nueva York, notó un bandazo extraño y la azafata les comentó que había fallado un motor pero que no había peligro. Al poco, otro bandazo mas fuerte, el segundo motor y el comandante dijo, "prepárense para la colisión", él entonces pensó tres cosas.
         
     La 1ª, todo cambia en un instante, pensó en todo lo que quería hacer y no hizo, en las personas a las que no les dijo lo que las quería y pensó que no hay que aplazar nada, que hay que disfrutar cada minuto porque puede ser el último. Ya no tiene buenos vinos en su bodega, se los ha bebido todos.

La 2ª fue el tiempo desperdiciado en cosas que no importan con gente que si importa. "No he vuelto a discutir con mi mujer, dijo, prefiero ser feliz que tener razón".

La 3ª, lo que mas me sorprendió fue comprender "que morir no da miedo". Parece que te estés preparando toda tu vida. Sientes tristeza porque amas la vida. Piensa que no vas a vivir siempre y preguntate si estás siendo la mejor persona que puedes ser.

       No está en nuestra mano evitar que nos ocurran cosas, lo que si depende de nosotros es la forma en que las afrontamos. No tienen por qué mermar nuestra felicidad. Nuestra felicidad no depende tanto de factores externos como de nuestro ánimo y nuestra actitud interior. También te puede ayudar tener una mascota.

     

Vamos a reir

 Por último y no menos importante, ríe, ríe todo lo que puedas. Como canta José Mota, quinientas risas y después quinientas más. Aprovecha todas las oportunidades que se te presenten de reír y cuando no se presenten, te las buscas. Lo mismo que cuando eres muy feliz, tienes ganas de reír, también la risa te conduce de la mano a la felicidad.  Eso sin contar el efecto probado beneficioso de la risa en la salud física (es uno de los ejercicios más saludables para el corazón, sistema cardiovascular y respiratorio) y para el equilibrio sicológico. No te digo que te cure las enfermedades, pero ayuda a curarte y además, entre tanto, lo pasas mucho mejor.

         No te cortes, cuenta y disfruta chistes y ríe todo lo que puedas.

Posoperatorio

La operación fue un éxito, en cuanto a resultados y a efectos secundarios. Claro que quedé tan agotado como si hubiera boxeado con el campeón, pero gané que es lo que cuenta. Ahora toca recuperar peso y fuerzas y cuento con la ayuda de mi querida mujercita

La noche en la UCI fue larguísima o me lo pareció, desorientado y sin saber que hora era ni donde estaba. A todo el que pasaba le preguntaba la hora. Dormí muy poco y recé y reflexioné sobre la ayuda que estaba recibiendo y que con ella todo saldría bien. Por la mañana llegó el médico y me dijo que me pasaban a la habitación. Me llevé la primera gran alegría.

Al llegar a la habitación 2109 me encontré con un paciente y su mujer. Les pedí prestado el móvil y llamé a Luci para contarle donde estaba. Como suponía, estaba con Lucía esperándome a la entrada de la UCI (se ve que me sacaron por otra puerta). Vinieron corriendo la mar de contentas, besos y abrazos. Disfruté de la compañía de mis hijas y Luci. Conforme pasó el efecto de la anestesia, aumentaron las molestias y al llegar la noche, el vientre se fue inflamando y me dolió bastante. Avisamos al médico, llegó a las 5 enfadado porque le habían despertado y la enfermera porque le habían reñido. Dormí muy poco pero Lucía menos aun.

El miércoles, pasaron consulta los médicos, vinieron Vivancos y Emilia y me contaron que iba todo bien. Me cambiaron a la habitación individual 2117. Gracias. Joaquin acompaña a Luci a la revisión de Belda, 14 y 15, mejor imposible. Lucía pasa la noche conmigo, descansamos los dos sin problemas

El jueves, revisión médica. Voy mejor, pero sigo sin beber porque aun no tolero ni el agua. Poco a poco iré admitiendo líquidos. Me quitaron las sondas sin molestias. empiezo a hacer pis con la botella, guardándolo para controlar. Me levantan a la mecedora y vinieron a verme Godo y Ricardo y aunque afónico, hablamos un rato. Me salió una erupción en la espalda por alergia a la ropa hospitalaria o los detergentes.

Primeros líquidos

El viernes Luci viene a las 11, después de la visita de médicos. Me curaron y cambiaron los protectores de los viales. Luci me trajo sábanas limpias para evitar los detergentes tan fuertes que usan . Lucía me afeita y me da crema. Gracias. Esta noche Lucia y yo dormimos bastante bien. Después de esto, no es sorpresa que pierda bastante peso. Nos alegró la visita de mi cirujana Paloma Luri que dijo que debía empezar a beber liquido, veremos que tal me sienta. Me informaron del resultado de las pruebas. No había afectado a los vasos linfático, solo algunos tumorales y manchas en el hígado.

Operación colon

El sábado dia 5, lo pasé en la habitación esperando, en observación, pero tranquilo y en buena compañía, que nunca me faltó. Por la noche cené con gusto pero me sentó mal con dolor torácico hasta que desalojé y quedé mas tranquilo. Lucia que había pasado la noche conmigo no pegó ojo, muy preocupada. !Que hijas y nietas tengo¡¡¡

Dos maravillosas nietas

El día siguiente, domingo día 6, adop-té dieta líquida, agua, caldo y zumos, obli-gado por la mala no-che pasada. A las 9,15 llegaron Luci y Marisa. Lucia está agotada. Pasé el dia bastante bien y rela-jado. Me ponen suero por goteo. Marisa se queda por la noche. La glucosa, la tensión y la temperatura dentro de la normalidad. Con un apoyo y un cariño como tengo es fácil mantener el ánimo y el optimismo. Este fin de semana me ha venido de cine para descansar y reponer fuerzas. He dormido y Lucia también.


Lunes dia 7, a las 12 h la especialista de digestivo me prescribe un Tac y un análisis que confirman lo previsto, hay que operar. Se ven dos tumores que obstruyen el colon. la biopsia confirma que son cáncer La cirujano Paloma Luri y Emilia coinciden en que hay que operar y lo mas pronto posible. Lo harán esta misma tarde. Confío plenamente en el equipo médico y acepto tranquilamente. Tengo total seguridad de que es necesario y que saldrá bien. Harán lo posible por evitar la temida bolsa. Me gusta que digan la verdad, eso aumenta la confianza. Te cuentan los riesgos que siempre conlleva la cirugía y te contagian la confianza. El susto está siempre por el fondo pero hay que tirar para delante. Me anuncian anestesia epidural y general, me parece muy bien, y así también lo acepto.                                               

Con mis chistes mis malos y besos de mis hijas y esposa, a las 5,30 h bajamos al quirófano y rezamos. Confiamos en los médicos pero también pedimos ayuda a Dios, les digo a mis hijas y mujer que hasta luego, creo que no tardaré mucho.   He rezado y reflexionado mucho en estos días. No lo hago para pedir milagros, sino para dar gracias por la ayuda y el amor que recibo, por la paz y la serenidad que acompañan a la oración y que ayudan al espíritu y al cuerpo.

Estuve un rato esperando a los anestesistas que me dejaron un recuerdo inolvidable de delicadeza, cariño y ternura. Fue emocionante. No solo me sedaron el cuerpo sino también el espíritu. A cualquiera que tenga que pasar por ese trance, les deseo la paz que me infundieron entre mi mujer, hijas y equipo médico.

A las 9,30 terminó la cosa y lo hizo bien. Sin molestias. Me pasaron a la UCI con muchas ganas de ver a mis chicas.Al cabo de un rato las dejaron pasar. La operación muy bien y han evitado la bolsa. Me han quitado 17 cm de colon con dos tumores de 3,50 y 2,50 cm. Hemos ganado una nueva batalla, ahora la que toca es la de la recuperación, que también ganaré. Besé a mis chicas todo lo que pude. La noche en la UCI me pareció larguísima, sin molestias apenas pero deseando ver a mis chicas. Cada vez que pasaba alguien cerca le pedía la hora y el tiempo no corría, se arrastraba lentamente. Recé y reflexioné en la suerte de tener una familia como la que tengo y dando gracias a Dios por todo. 

No tuve molestias, solo paz.

Contraataca

l día de los enamorados coincidió con mi visita al urólogo, que confirmó que lo de próstata iba bien. Como España se-gún Aznar. Volverá a verme después del verano. Veremos.

El día 18 me ponen la segunda inyección del bloqueo hormonal, sin problemas. El dia 20 el resultado del Tac confirma lo previsto, que tengo artrosis lumbar con otras cosas de nombres extraños. No te esfuerces mucho en el gimnasio, me aconsejan. Los ejercicios no me suponen la menor molestia.

El 4 de Marzo me dan de alta de una dolencia que no tuve en ningún momento. Habían visto en una radiografía lo que parecían quistes o algo asi. Le expliqué al especialista que tuve tuberculosis de niño y que eso era las huellas, calcificaciones, pero me tuvo años haciéndome pruebas y no me abrió para comprobarlo porque no me dejé.

El 2 de Mayo veo un poco de sangre al defecar, aunque es sangre limpia, me da algo de repelús y mas al repetir el día siguiente. Al ser poco y no repetir de nuevo, no nos alarmamos demasiado y mantenemos el viaje que había organizado. Se trataba de un viaje a Granada para los amigos de la Asociación y sus mujeres (vamos 16), para lo que contrato autobús, hotel y restaurantes. Vivancos se pone de acuerdo con su cuñado Arturo, profesor de historia, guía turístico de Granada que nos ilustra amena y profundamente sobre la historia de Granada. Disfrutamos a tope y conocimos muchas cosas interesantes.

El grupo con nuestro guía Arturo, Fila superior, 4º por la izqyuierda

La alcazaba
La riqueza de mosaicos, azulejos, grabado alusivos a Alá es una maravilla.

El patio de los leones, mas bonito que nunca

Comida en el Tendido 1, Plaza de Toros

La comida fue en todas partes estupenda, me felicitaron por la selección. Cuando vas de tapeo te sirven con la bebida que pidas una tapa, siempre distinta. Lo que mas abunda son las berenjenas fritas con miel, asadas o a la paja. El dia 9 regresamos a Alicante y por el camino nos enteramos del fallecimiento repentino de un compañeros, Pedro Casamayor. Rezamos en el autobús todos por él.

El 12 de Mayo, me recibe Sara, mi medico de cabecera, para consultarle lo del leve sangrado, me remite al especialista de digestivo, de cuyo nombre no quiero acordarme, que sin el menor reconocimiento me prescribe una colonoscopia sin sedación, está loco Como es lógico lo aceptamos pero no nos conformamos, insistimos en el Hospital y nos lo pasaron con sedación y urgente, me lo programaron para el 5 de Julio.

El 3 de Julio, empezamos los preparativos para la colonoscopia, hay que beber y desbeber mucho líquido. Normalmente es desagradable pero en mi caso fue fatal. No conseguí terminar el líquido (aunque después y la vista de lo visto me dijeron que no comprendían como había podido tragar tanto) y tampoco pude desalojar como debía. Después de una noche dura con vómitos, fiebre y convulsiones me encontraba fatal, pensando que no me podrían hacer la colonoscopia pero necesitaba un médico. No me tenía en pie.

El dia 4 entré en la UCI a las 9 deshidratado. Hasta la 1,1/2 me hidrataron, luego me hicieron la colonoscopia pero solo pudieron explorar una parte del colon por el tapón formado, un estrechamiento que parece un tumor. Después me pasaron a urgencias por consejo de la Dra Gloria. Poco después me subieron a planta, hab. 4107. Está claro que me tendrán que operar. Esto significa que aunque he ganado la batalla de la próstata, todavía no he ganado la guerra. Ahora viene la segunda batalla, que también voy a ganar y podré con el cáncer.

Siempre he sido plenamente consciente de la familia tan extraordinaria que tengo y del amor que demuestran siempre que hace falta, pero en esta ocasión se superaron y son parte fundamental de mi recuperación. Estuvieron a mi lado a cada momento, me dieron ánimos, alegría y esperanza. Tuve muchas horas de reflexión en las que no cesaba de sentirme afortunado por la ayuda y el cariño que recibo a cada momento, por mi mujer, mis hijas, yernos, nietas y amigos. He sabido que tengo a mucha gente rezando por mi.

Por vía intravenosa me inyectan suero y medicinas y con las manos, miradas, gestos y compañía me dan las fuerzas que necesito. Con su ayuda volveré a vencer al cáncer.